Las normas de inmigración en los Estados Unidos están establecidas por la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA). Bajo esta legislación, cada año se pueden otorgar hasta 675,000 visas de inmigrante en diferentes categorías.
Los visados de inmigrante proporcionan a las personas residencia permanente y autorización de trabajo (Tarjeta Verde). Sin embargo, no hay restricciones anuales de visado para cónyuges, padres e hijos menores de 21 años de ciudadanos estadounidenses.
El estatuto legal humanitario, como el asilo y el estatuto de protección temporal, tampoco tiene límite de número.
Cuando una persona recibe un visado de inmigrante o se le concede asilo, puede solicitar la residencia permanente legal en EE.UU. (Tarjeta Verde). Los titulares de la Tarjeta Verde pueden solicitar la nacionalidad tras 5 años (en algunos casos 3 años) de residencia en EE.UU.. Aunque no soliciten la nacionalidad, siguen teniendo derecho a vivir y trabajar indefinidamente. No obstante, están sujetos a las leyes de inmigración mientras residan en Estados Unidos.
Cada año, Estados Unidos también concede visados temporales (visados de no inmigrante) a turistas, estudiantes y trabajadores temporales, que les permiten permanecer en el país durante determinados periodos de tiempo. Los visados de no inmigrante cubren estancias temporales por motivos de trabajo, estudio o visita. Mientras que algunos visados por motivos laborales están limitados por cuotas, categorías como los visados de turista y estudiante no tienen límite de número anual.
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